Ammán es una de las ciudades más conocidas de Jordania, una nación árabe situada en la orilla oriental del río Jordán, se define por sus antiguos monumentos, reservas naturales y balnearios. Es el hogar del famoso sitio arqueológico de Petra. Situada en un estrecho valle con tumbas, templos y monumentos tallados en los acantilados de arenisca rosada que la rodean, Petra se gana su apodo, la "Ciudad Rosa". Deslizate hasta abajo y conoce los mejores hoteles donde alojarse en Ammán.
1. Beit Al Baraka Hotel
El Beit Al Baraka es el único lugar donde alojarse en Ammán que se encuentra en la ciudad; una estancia en este bed and breakfast abre una mirada al interior de la cultura del norte de Ammán. A los viajeros que valoran el turismo sostenible les encanta el mobiliario local, los desayunos ecológicos, las acogedoras zonas comunes y las habitaciones básicas de un barrio residencial.
Se encuentra a poca distancia de restaurantes, tiendas y el famoso yacimiento arqueológico grecorromano de la antigua ciudad de Gadara. Desde el techo, los visitantes pueden ver los Altos del Golán y el Monte Hermón en el Líbano. Por otro lado las instalaciones son básicas, tres dormitorios y dos baños compartidos, además de áreas comunes.
Los propietarios son extremadamente serviciales y hablan un inglés perfecto. Se puede añadir una tercera cama, aunque esto lo hace un poco estrecho; cabeceras y alfombras hechas a mano y fotos del sitio de Gadara animan las paredes blancas y llanas. Las ventanas se abren para dejar pasar los sonidos de los gallos y la llamada a la oración. Las habitaciones son cómodas para dormir, pero los huéspedes querrán pasar el rato en el salón o en el jardín.
2. Kempinski Hotel Aqaba Red Sea
Este elegante hotel donde alojarse en Ammán posee vistas a una playa privada, aprovecha al máximo su ubicación en el Mar Rojo. También hay una piscina grande y atractiva, un comedor al aire libre y habitaciones blanqueadas. El hotel está bien situado para explorar la vida nocturna de Aqaba. El Kempinski se encuentra justo en el medio de lo que la gente viene a Aqaba, de la playa, restaurantes, y algunos clubes nocturnos. El hotel también está a solo 10 minutos del aeropuerto.
Además del sitio arqueológico de Ayla, la ciudad islámica medieval que se encuentra debajo de la actual Aqaba. El spa ofrece faciales, exfoliantes, masajes y envolturas en seis salas de tratamiento con vista al Mar Rojo. Las 200 habitaciones están decoradas con una paleta de color blanquecino, con grandes ventanales que muestran las azules aguas del Mar Rojo.
Los balcones privados con mesas y sillas proporcionan una vista aún mejor. Las habitaciones son espaciosas, luminosas y tranquilas y están diseñadas para asegurar que los huéspedes quieran quedarse. Los baños están separados de los dormitorios por paredes de cristal, lo que hace que la bañera, el lavabo y el bidé sean visibles para el resto de la habitación.
3. Dead Sea Marriott Resort & Spa
Este amplio hotel resort donde alojarse en Ammán tiene una atmósfera de fiesta en la piscina y acceso a una playa privada en el Mar Muerto. La Reserva Natural de Mujib y el Río Jordán son de fácil acceso desde el hotel. El Mar Muerto es la atracción aquí, y no hay mucho más a poca distancia. Pero para la gente que quiere flotar en el agua ultra-salada del mar y luego relajarse en la piscina, el Marriott tiene todo lo que necesitan.
Los visitantes con vehículos pueden conducir hasta la Reserva Natural de Mujib o hasta las orillas del río Jordán. Tiene disponible un spa que ofrece una amplia gama de servicios, además de un baño de vapor y una piscina cubierta llena de agua del Mar Muerto. Incluso los huéspedes pueden revolcarse en el lodo terapéutico de la costa, nadar en el mar o relajarse en las tumbonas.
Las 233 habitaciones y 17 suites del Marriott son modernas, cómodas y espaciosas; las enormes ventanas del piso al techo se abren a los balcones. Los baños de mármol incluyen servicios de lujo como bidés y batas, y los huéspedes disfrutan de ropa de cama de alta calidad y servicios de doblado.
4. The Boutique Hotel Amman
Este hotel donde alojarse en Ammán es económico te ofrece alojamiento básico en el corazón del centro de Ammán. La conveniente ubicación y las asequibles opciones de alojamiento le permiten pasar la noche en dormitorios compartidos o en habitaciones privadas; y luego pasar el día explorando la animada cultura, la historia y la gastronomía de la zona.
Puedes caminar hasta Citadel Hill, el anfiteatro romano, Rainbow Street y una gran variedad de mercados, cafés y restaurantes, como el legendario Hashem, famoso por su sabroso falafel y hummus. El ambiente informal y acogedor del Boutique Hotel Amman invita especialmente a los viajeros solitarios que buscan caras amistosas y potenciales compadres de aventura.
5. Hotel Feynan Ecolodge
El Hotel Feynan Ecolodge es uno de los lugares más atractivos donde alojarse en Ammán. Se encuentra al borde de la Reserva de la Biosfera de Dana, en un antiguo valle minero de cobre, el albergue cuenta con un entorno de gran belleza. Está rodeado de piedra de naranja quemada y adelfa rosa de Barbie; los únicos ruidos son el balido ocasional de cabra y rah de burro.
Los huéspedes dejan sus vehículos en un centro de recepción, y luego son transportados los últimos 8 km fuera de la carretera hasta el albergue en vehículos 4x4 maltratados por los lugareños. El programa de actividades diarias son paseos, comidas, charlas de observación de estrellas, puede parecer un poco "organizado" para algunos, pero todo es opcional.
De otra manera en las 26 habitaciones, las camas son firmes y bajas, decoradas con fajas de tela de seda saya de Siria, mientras que los mosaicos de vidrio resaltan las velas que dan luz al anochecer. El lodge puede ser respetuoso con el medio ambiente, pero eso no significa que los huéspedes tengan que soportar duchas frías; los paneles solares debidamente provistos, aunque no haya aire acondicionado ni tomas de corriente.
6. Ajloun Cabins Hotel
Aunque Ammán puede ser conocida por sus extensiones de desierto de otro mundo, también es el hogar de algunos refrescantes escapes del bosque. De esta manera duerma bien en una de las confortables cabañas Ajloun Cabins de la Royal Society for the Conservation of Nature, enclavadas en la tranquila Reserva Forestal de Ajloun.
Despierta con aire limpio y vistas refrescantes de pistachos, algarrobos y robles desde su balcón privado, prueba alimentos de origen local en el restaurante del lugar; y disfruta de excursiones de un día al cercano sitio arqueológico de Jerash o al Castillo de Ajloun, o haga una caminata guiada en la reserva.
7. Rahayeb Desert Camp
El hotel Rahayeb Desert ofrece más allá de una entrada enmarcada por gigantescas cafeteras árabes doradas y empequeñecida por acantilados rocosos; un grupo de cabañas en tiendas de campaña brinda un hogar confortable para aquellos que se aventuran en el desierto de Wadi Rum. Rahayeb está a unas 45 millas de la ciudad portuaria de Aqaba, pero se siente mucho más lejos de la civilización.
La ubicación se trata de experimentar el desierto de Wadi Rum, como se ve en Lawrence de Arabia, y solo es accesible en vehículos todo terreno. Este campamento es para aquellos que ansían tranquilidad, vistas al desierto y aislamiento. Aparte del gran espacio de restaurante y mango, las instalaciones son mínimas, un área de salón cubierta, amueblada con sofás y ceniceros de rayas rojas, con vistas al desierto, una cubierta descubierta perfecta para observar las estrellas, y un patio con una hoguera.
El personal puede organizar actividades como paseos en camello al amanecer o en globo aerostático, buggies de dunas o vuelos ultraligeros. Los interesados en la cultura local pueden unirse a una familia beduina para tomar un café y un trago de leche de camello. Rahayeb puede alojar hasta 165 personas en sus 51 tiendas de campaña.
8. Petra Marriott Hotel
El hotel Marriott tiene vistas panorámicas del desierto y las experiencias locales como los baños turcos en el lugar. La gente viene a Petra para ver la antigua ciudad nabatea, hoy Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, que se encuentra a 15 minutos en coche del hotel al yacimiento arqueológico. Afortunadamente, el restaurante, el bar, la piscina y el spa ofrecen suficiente entretenimiento independiente.
Y el lugar, en lo alto de una colina con vistas al enorme valle desértico que hay debajo, hace que valga la pena sacrificar el sueño al levantarse temprano para el amanecer. Asimismo las habitaciones dobles son cómodas pero no especialmente memorables. La ropa de cama blanca, las cortinas y el cabecero marrón, y los muebles simples y modernos hacen que se sienta más como una sala de juntas que como un beduino. Algunas habitaciones se benefician de tener sofás elegantes.
Los baños de mármol incluyen bidés. El agua embotellada es gratis, y las habitaciones tienen café y té. Las mejores habitaciones tienen vistas al desierto, pero otras dan a una zona de aparcamiento. De cualquier manera, la acción es fuera de la habitación y los invitados probablemente no querrán quedarse.
9. Hotel La Locanda
El primer hotel temático de Amman, La Locanda, es una opción encantadora situada en el corazón del animado Al Weibdeh de Amman. Aunque el hotel fue recientemente renovado, el edificio es uno de los más antiguos de la zona y las renovaciones se realizaron respetando la arquitectura original. El tema general es la música y el arte, y el diseño de cada sala es único, inspirado por un artista o músico individual. En este hotel de moda encontrará tanto a los visitantes como a los locales disfrutando de música en vivo y de eventos.
10. Mövenpick Resort & Spa Dead Sea
El hotel se encuentra en el extremo nororiental del Mar Muerto, uno de una serie de hoteles en el punto más bajo de la Tierra (a unos 420 metros bajo el nivel del mar). Es un fácil traslado desde el Aeropuerto Internacional Queen Alia, a unos 40 minutos en coche. Las instalaciones del hotel son innumerables, más de 3.000 metros cuadrados de piscinas, así como pistas de tenis y una playa.
La costa del Mar Muerto es rocosa, pero las ollas de barro que se acumulan naturalmente aquí están a mano, ensuciarse, ya que el ungüento es supuestamente excelente para la piel. Además el Balneario de Zara ocupa una superficie colosal de 6.000 metros cuadrados, con 31 salas de tratamiento, un bar de zumos, un gimnasio y 70 tratamientos faciales, masajes y envoltorios de barro de alta calidad.
Las 346 habitaciones son espaciosas, con un mínimo de 28 metros cuadrados, pero más bien suaves, en una paleta de color naranja terracota, marrón y crema. Algunas marcas de rozaduras en la pared de unas habitaciones, pero aparte de eso, el alojamiento está bien equipado y es cómodo. Espera un balcón o terraza junto a cada habitación, un mini-bar gratuito sin alcohol, e instalaciones para preparar té y café.
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